Este meme de Boromir:
¿Se lo ha inventado una persona o una inteligencia artificial?
Los caminos de la investigación sobre inteligencia artificial son insondables. Y si no que se lo digan a este par de investigadores de Stanford que han estado trabajando sobre cómo enseñar a una inteligencia artificial a generar memes. Si: ahora esas imágenes chorras con chistes que circulan sin fin por Internet debido a su naturaleza viral se pueden generar apretando un butón, sin tener que pensar mucho – que tampoco es que haya que pensar demasiado para hacer uno pero…
El algoritmo en el que ha trabajado analizó 400.000 tripletes de imágenes, etiquetas (el nombre «popular» del meme, ej. «novia psicópata») y textos (chistes). Esto son más o menos unas 160 combinaciones de imagen + etiqueta con varios miles de «chistes» sobre cada una de ellas. El resto es un vocabulario, reglas semánticas, una inicialización aleatoria y vectores por todos lados para refinar el proceso de la red neuronal convolucional.
Afinar los buenos chistes no es fácil, y menos para una IA. En el proceso propuesto se incluyen métodos para comprobar que la gramática del resultado es correcta y algo llamado «factor de perplejidad» (que debe ser como el «factor ¡ajá!» del chiste). Una vez preparados los memes se muestran en grupos de cinco a unos voluntarios para que los evalúen: primero para medir la «atención» que consiguen y luego para ver si son capaces de distinguir los creados por humanos de los creados por las máquinas – y también para puntuar lo chistosos que resultan, en la apropiadamente denominada «prueba de hilaridad». Al cabo de un tiempo, la IA sabe generar memes ella solita.
El trabajo completo se puede leer aquí: Dank Learning: Generating Memes Using Deep Neural Networks (Aprendizaje Nauseabundo: Generación de memes mediante redes neuronales profundas) y aunque por el tema –y el título– no lo parezca no es demasiado chistoso sino más bien técnico.
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Solución: El meme de Boromir lo generó la IA entrenada por los investigadores.