Por Nacho Palou — 11 de marzo de 2016
Los robots diseñados para retirar el combustible nuclear de Fukushima, la central nuclear que resultó dañada tras el terremoto y posterior maremoto en marzo de 2011, han muerto debido a la gran cantidad de radiación, según se recoge en The robots sent into Fukushima have 'died'.
Cada uno de los robots se diseñó dependiendo del estado y circunstancias de cada uno de los edificios y llevó literalmente años desarrollarlos y construirlos. Pero no han durado mucho: «en cuanto se aproximaron a los reactores la radiación destruyó los cables y los dejó inservibles.»