Tras años de espera -mi primer pedido a Amazon.com es de septiembre de 1996 y creo que desde entonces estoy enganchado- desde hace un minuto por fin está en funcionamiento Amazon.es.
Así que por fin los que nos dedicábamos a hacer pedidos y recomendar las tiendas de Amazon de los Estados Unidos y del Reino Unido disponemos de una alternativa más cercana en la que tan siquiera necesitaremos darnos de alta de nuevo y que no se verá sometida al azar del proceso de pasar por aduana como sucedía con los pedidos a EEUU.
Igual que su progenitora ha cambiado en todos estos años y ha dejado de ser sólo la mayor librería de Internet, Amazon en España no sale sólo con libros en todas las lenguas oficiales del país y en inglés y otros idiomas.
También incorpora las categorías de cine, series y música, informática, videojuegos, electrónica de consumo, pequeños electrodomésticos, juguetes y relojes, con un catálogo que hará palidecer el de más de uno de sus competidores en cuanto a su extensión, que según la carta de presentación de Jezz Bezos, fundador de Amazon, está formado entre otras cosas por 2,5 millones de libros en español, 130.000 DVD, 450.000 CD y unos 65.000 gadgets.
Sin embargo, y dado que en España el precio de los libros está regulado por la Ley 10/2007, de 22 de junio, de la lectura, del libro y de las bibliotecas, Amazon no podrá realizar aquí el tipo de ofertas a las que nos tiene acostumbrados en cuanto al precio de estos, aunque sí en sus otras líneas de producto y en libros de editoriales no españolas.
Pero en cualquier caso, y teniendo en cuenta lo mal que lo ha estado haciendo su competencia, y este no es más que un ejemplo de muchos, puede que no lo necesite.
Amazon ha visto claro que las cuando menos curiosas políticas de gastos de envío de su competencia y su escasa habilidad a la hora de cumplir plazos de entrega le dan una enorme oportunidad de diferenciarse, y ahí está una de sus apuestas principales en nuestro país.
Para empezar, los gastos de envío estándar son unos más que competitivos 2,99 euros por envío -independientemente del número de ítems que este incluya- con un plazo de entrega de 3 a 5 días.
La opción de 2 a 3 días sube a los 5,99 euros, mientras que la de 1 día son 8,99 euros, siempre por envío.
La principal salvedad es que para las Islas Canarias, Ceuta y Melilla la única opción que ofrecerá es la de envío estándar de 3 a 5 días, pero sin sobrecoste alguno, algo que los habitantes de esos lugares están más que acostumbrados a sufrir.
Por otro lado, si un pedido incluye libros por un valor de 19 euros o más, los gastos de envío estándar para estos serán gratis, aunque se seguirán pagando los gastos de envío correspondientes al resto de los ítems del pedido si los hubiera.
Y también está la posibilidad de contratar Amazon Premium para los envíos al territorio nacional, que por 14,95 euros al año da gastos de envío gratis en todos los pedidos del año, salvo en el caso de que se opte por el servicio de 24 horas, en cuyo caso el coste de este pasa a ser de 2,99 euros.
Amazon España también enviará pedidos al resto del mundo, aunque con ciertas limitaciones, pues no enviará productos electrónicos y pequeños electrodomésticos, juguetes y relojes fuera de Europa.
En este caso, los envíos estándar son de 6 euros por pedido a Europa y latinoamérica, y de 14 a Brasil, Estados Unidos y Japón, aunque los plazos de entrega son un poco más largos, mientras que los express serán de 14 euros a la Unión Europea y 20 euros al resto del mundo.
Amazon España tiene además también preparada su red de distribución para asegurarse de que los envíos llegan en el tiempo estipulado, otro factor muy importante en la satisfacción del cliente.
Para esto, cuentan con dos transportistas que se encargarán de hacer llegar los pedidos a los clientes independientemente de donde estén los artículos que los formen en los centros de distribución que la empresa tiene por toda Europa.
Así, es posible que un pedido se entregue dividido en dos paquetes, que incluso podrían no llegar en el mismo día, pero siempre sin coste adicional alguno.
Finalmente, en cuanto a atención al cliente, Amazon.es tendrá un centro de atención propio en español, no subcontratado, con el que tienen como objetivo mantener el estándar de empresa con mejor atención al cliente.
Si hay que poner un pero a esta gran noticia es que en el lanzamiento de Amazon.es faltan los libros electrónicos para su plataforma Kindle.
Obviamente a estas alturas esto no es por problemas técnicos de ningún tipo ni por deseo de Amazon, sino porque las negociaciones pertinentes con las editoriales involucradas no están todavía terminadas, pero todo parece indicar que sólo es cuestión de meses que la situación cambie.
Así que ha llegado el momento de la verdad para el comercio electrónico en España, y salvo meritorias y escasísimas excepciones que hace años que lo están haciendo bien, va a pillar a muchos con los pantalones bajados.
Más de un gran nombre tendrá que ponerse las pilas -y mucho- si pretende estar a la altura en servicio y amplitud de catálogo de Amazon.
Y por fin se demostrará de una vez que si el comercio electrónico en España no ha crecido en la forma deseada no es precisamente por culpa de los compradores; comprar los regalos de estas navidades va a ser sin duda mucho más fácil.
Por mi parte, no puedo más que decir que: «¡Por fin!»