Tal y como se ve en este episodio de BritLab, un programa de televisión de la BBC, las primeras «pantallas táctiles» (como podía ser la del HP-150) eran poco impresionantes aunque sencillamente funcionaban: bastaba poner el dedo, que interceptaba unos haces infrarrojos invisibles que cruzaban la pantalla de lado a lado y de arriba abajo, para que el ordenador dibujara ¡en modo texto! lo que se trazara en ellas. Además de eso también podía usarse la misma técnica en algunos juegos sencillos.
Un gran aplauso, eso sí, para la demostración final donde se combinan una cámara, globos de helio y hasta una pequeña pistola de control remoto para lograr una escena muy efectista. Teniendo en cuenta que estamos hablando de 1982 la cosa tiene mérito.