Según se puede leer en SOPA and PIPA dead – for now tanto Lamar Smith, promotor de SOPA, como Harry Reid, promotor de PIPA, han decidido aparcar la tramitación de ambas leyes.
Las causas que apuntan son varias, aunque parten de las dudas expresadas por la Casa Blanca el fin de semana pasada acerca de la posibilidad de que estas leyes pudieran ser utilizadas para censurar contenidos en Internet, yendo claramente más allá de su objetivo estipulado, aunque esto no le ha gustado nada a Hollywood.
Luego, a lo largo de esta semana, muchos de los congresistas y senadores que antes las apoyaban dejaran de hacerlo, en especial tras el apagón de numerosos sitios del pasado miércoles.
Evolución del apoyo a SOPA/PIPA: 18 de enero, 80 a favor y 31 en contra; 19 de enero, 65 a favor y 101 en contra (vía Boing Boing)
Y, finalmente, los cuatro candidatos presidenciales del partido republicano dijeran el jueves por la noche que ninguno de ellos apoyaría ninguna de estas leyes en su forma actual.
Naturalmente tanto Smith como Reid han expresado su desilusión ante esto y prometen intentar seguir negociando y traerlas de vuelta en una forma más aceptable –si esto es posible– aunque según dicen en Politico es poco probable que esto suceda en lo que queda de año teniendo en cuenta que pronto las elecciones presidenciales dominarán el panorama político estadounidense.
Esto va más allá de la decisión anunciada por el Congreso el fin de semana pasado de congelar la ley SOPA hasta encontrar un consenso, pero nada asegura que en el futuro estas dos leyes puedan resucitar.
Igualito que en España, vaya.
- ¿Por qué deben importarnos SOPA y PIPA a los que no vivimos en los Estados Unidos? Porque sus objetivos van mucho más allá.
- El papel de los jueces en la Ley Sinde-Wert: básicamente ninguno, digan lo que digan los políticos que la han aprobado.
- #ComparteCultura - Lista de contenidos culturales gratuitos accesible desde la red, y es que no se le pueden poner puertas al campo.