Por @Alvy — 7 de octubre de 2019

Galaxian (1979) fue uno de los grandes éxitos de Namco, un matamarcianos que supo innovar respecto a los videojuegos de la época con detalles que hoy damos por sentado pero que entonces eran totalmente novedosos:

  • Gráficos en color RGB (hasta entonces eran monocromo o color simulado)
  • Iconos para las «naves/vidas restantes» siempre en pantalla
  • Banderas para indicar la fase del juego
  • Enemigos con diferentes tipos de «personalidad propia»
  • Jingles musicales, creados con sintetizador

Este minidocumental de Ahoy cuenta algunos detalles más y tiene imágenes de Galaxian y otros juegos en acción. Era también mi videojuego favorito, sólo por detrás de Defender (Williams, 1981). Mi récord eran más de 300.000 puntos si mal no recuerdo.

La nave del juego era la Galaxip y la gente ponía nombre a las diferentes naves enemigas, más conocidas como «moscas» por su aspecto insectoide, que ya era aparente incluso en el dibujo de la recreativa y los folletos. Estaban las verdes que eran lentas, las moradas rápidas y temibles y las naves nodrizan descendían siempre que podían con escoltas rojas. Galaxian utilizaba como hardware un procesador Z80 a 3 MHz y tenía una pantalla (vertical) con una resolución de 224 × 256 píxeles.

Aunque existieron versiones para casi todos los ordenadores y consolas familiares de la época ninguna era demasiado fiel al original: era difícil que tuvieran la misma fluidez y efectos visuales. Del propio juego existió una segunda parte que comercialmente fue muy exitosa: Galaga, que sin embargo en España no llegó a ser tan popular. Curiosamente todo el mundo sabe de ella porque aparecía en una escena al principio de la película Juegos de guerra (1983) en el salón de máquinas recreativas; la sensación que dejaba verla era «es un juego como las moscas, pero diferente».

Relacionado:

Compartir en Flipboard Publicar / Tuitear Publicar