Mindball es un simpático juego en el que literalmente se compite con la mente: un cacharro conectado a la cabeza de los dos jugadores recoge la actividad de su cerebro mediante unos sensores, y en función de eso mueve una pequeña pelotita, que va de un lado para el otro. Una pantalla muestra el electroencefalograma de la actividad cerebral para que el público pueda ver cómo se desarrolla la partida:
Al parecer para jugar basta estar relajado y concentrarse, aunque no está muy claro «en qué hay que pensar», sino dejarse guiar por la intuición y ver qué reacciones y pensamientos hacen moverse la bola: quien se capaz de «enfocarse» en algo (da igual en qué) ganará, el que se ponga nervioso perderá.
Hay más información en el blog de su inventor: Mindball Inventor [en italiano].
Actualización: En Mindball: jugando con la mente Pixel y Dixel contaron su experiencia con el juego en la pasada Campus Party, donde hubo una notable anécdota que nos enviaron por correo:
En el Mindball vimos cosas divertidas, como una chica que ganaba a todo el mundo… Hasta que se cruzó con un tipo que jugaba cerrando los ojos, rollo Jedi. Y le iba ganando, hasta que la chica (muy guapa por cierto) le dijo: «imagíname en bikini» La actividad cerebral del Jedi subio de golpe, y la chica ganó de nuevo.
Actualización (20 de enero de 2023) – El vídeo original desapareció, pero encontré otro equivalente.