La idea tras este airbag para personas que en el vídeo puede verse en acción a cámara superlenta es que se abra cuando detecte un atropello. Para ello cuenta con unos sensores que activan el sistema de protección en caso de que el coche circule entre 20 y 50 km/h.
Pese a los daños de un accidente de este tipo se ha calculado que se pueden reducir notablemente los daños en la cabeza de la víctima cuando impacta contra el parabrisas – o más concretamente contra la zona sólida hay entre el parabrisas y el capó: el truco es levantar un poco el capó para hacerlo más flexible, además de inflar la protección del airbag como bolsa en cuestión de milisegundos.