Por Nacho Palou — 30 de Marzo de 2007
El arma más horripilante del mundo — [Plutón era] un misil de crucero trisónico con ojivas múltiples de hidrógeno y propulsión nuclear. Su mera onda de choque era capaz de matar al sobrevolar el suelo a baja altura; si esto no acababa contigo, lo haría la radiación de su motor, un reactor nuclear desnudo que iba expulsando pedazos de plutonio a medio gastar y altamente radioactivo en su recorrido. Y si todo esto fallaba, siempre estaban las 16 cabezas termonucleares de un megatón cada una.
Afortunadamente “el arma procedente del mismo infierno” nunca voló. El Proyecto Plutón se canceló el 1 de julio de 1964, tras engullirse 260 millones de dólares de entonces.