Por Nacho Palou — 15 de enero de 2013
En The Guardian, Orlando is the cat's whiskers of stock picking,
El reto enfrentó a varios profesionales de inversión con un grupo de estudiantes y un gato de nombre Orlando. Cada equipo contaba con 5.000 libras para invertir en el índice FTSE de la bolsa de Londres. Aunque inicialmente los profesionales iban en cabeza con 497 libras de beneficio, contra las 292 libras obtenidas por Orlando, el gato, un giro inesperado en el último trimestre hizo que la cartera del gato aumentase y así cerrar el año con 5.542,60 libras, en comparación con los profesionales que sumaban 5.176,60 libras.
El gato seleccionaba en qué compañías invertía lanzando su ratón de juguete favorito sobre un panel numerado en el que cada número estaba asignado a una empresa del FTSE, hecho que refuerza la Estrategia del mono.