Por @Alvy — 22 de septiembre de 2006

Tranax Minibank, a.k.a. «Bodas de CanỡNiños, no intentéis esto en casa! ¡Ni en la calle! En Programming ATMs to Believe $20 Bills Are $5 Bills (Programando un Cajero Automático para que crea que los billetes de 20 dólares son de 5 dólares) Bruce Scheneier cuenta esta curiosa historia, de la cual hay una versión en Cajeros automáticos regalan dinero (Kriptópolis), sobre cómo reprogramar un cajero automático de banco como los que hay en cualquier calle para que piense que el cajetín donde están los billetes de 20 dólares (o euros) es el de los billetes de 5 dólares (o euros). ¡Caos! La gente puede sacar tranquilamente el dinero, que es mágicamente multiplicado por cuatro al ya tradicional estilo de los panes y peces.

Al parecer los manuales técnicos de algunos tipos de cajeros automáticos (en este caso el Tranax Mini Bank 1500) son relativamente fáciles de conseguir, a veces comprándolos desde la web del fabricante WTF (!!) o incluso bajándolos en PDF de Internet WTF ×2 (!!!!????) Los bancos, esas tiernas entidades tan amables con la gente, se olvidan en ocasiones de cambiar las contraseñas por defecto que permiten reprogramarlos, algunas de las cuales son tan poco ingeniosas como 1234. ¡Ouch! De modo que simplemente acercándote a los cajeros y sabiendo qué hay que hacer puedes teclear los códigos por defecto y jugar un poco con el modo de diagnóstico… y hacer otras cosas coo las de la historia de los billetes. Y eso que no son máquinas de Coca-Cola precisamente.

Nota: Nosotros no tenemos esos manuales, ni sabemos los códigos secretos, ni estuvimos allí, ni sabemos nada de nada, ni nadie nos vió y además no pueden probarlo, así que no nos escribas para preguntar… ;-)

(Vía Kriptopolis [Nota: la página original desapareció, pero estaba guardada en Archive.org] y Schneier on Security, donde hay un vídeo de la noticia en CNN, donde se ve a la gente llevándose el dinero. Obviamente el dinero hay que sacarlo con una tarjeta de una cuenta «personal», no es tan fácil tener una no-rastreable… y también hay cámaras de vídeo y… ¡A la cárcel!)

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