Por @Alvy — 29 de enero de 2011

Esto es lo que pasa cuando los grajos vuelan demasiado bajo, comienzan a usar la tuneladora e incluso consideran presentarse al casting de El Núcleo 2: que hasta las pompas de jabón se congelan. El experimento recreativo lo llevaron a cabo en el Observatorio del Monte Washington, en New Hampshire (Estados Unidos) y la «fórmula mágica» para las pompas está explicada en su página: jabón, agua y un poco de azúcar.

Aquí los grajos ya volaban rasantes por lo menos En el vídeo se puede ver lo que sucede a partir de temperaturas de -28°C hasta -33°C más o menos. Según el frío, las pompas se congelan pero se rompen, como en condiciones normales… Hasta que llega un punto con el frío más extremo en que el jabón comienza a congelarse incluso antes de soplarlo (¡gran imagen esa!) Conclusión: que si decidiste por ensayo y error que atrapar una pompa de jabón con la mano era imposible, es que no tenías las condiciones climáticas adecuadas: mira el final del vídeo (03:10+)

(¡Gracias, @TuristaEnTuPelo!)

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