Entre los vehículos blindados modernos que circulan por las calles (sin ser vehículos de seguridad comercial, como los de los bancos o empresas de transportes) se encuentran algunas preciosidades que bien podrían pasar por coches convencionales a los ojos de los profanos.
El BMW 7 Series High Security y el Mercedes-Benz S-Class Guard son algunas de estas feroces bestias de la carretera, que a pesar de su aspecto convencional y de alcanzar los 240 kilómetros por hora encierran toda una serie de secretos bajo su dura piel.
BMW 7 Series High Security
Algunas de las características básicas de estos coches son los cristales a prueba de balas y la estructura reforzada con capas de blindaje, normalmente de acero o materiales compuestos resistente a todo tipo de impactos. También las ruedas a prueba de pinchazos y el tanque de gasolina protegido a prueba de balas son detalles vitales. Todo esto hace que su peso sea notablemente superior al de los coches convencionales, algunos hasta tres toneladas.
Mercedes-Benz S-Class Guard
Entre las características menos conocidas están los extintores anti-incendios automáticos, el control de presión y temperatura automático de los neumáticos y el arranque remoto. En ocasiones el interior puede sellarse y presurizarse, y para protegerse de ataques con gases algunos son una especie de burbuja donde se puede respirar durante horas sin tener que abrir las puertas. La lista de detalles de este tipo de vehículos es impresionante y su nivel de seguridad se mide con los términos como B4, B4+, B5, B6 y B7 que determina el tipo de munición y armas cuyos ataques puede soportar.
Casi todas las marcas de lujo como Jaguar, Audi y otras ofrecen también versiones modificadas, normalmente «a mano» de modelos completamente blindados para VIPs, especialmente políticos. Se considera que el Jaguar del primer ministro británico es uno de los más seguros del planeta. Lo llaman «a prueba de Al Qaeda» y es capaz de soportar hasta el impacto de una granada. Además de incorporar contramedidas electrónicas, reservas de aire y medidas anti gases incluye más allá del teléfono e interfono típicos todo un «centro de comunicación» propio para garantizar su independencia.
Actualización (4 de enero de 2008): Javier condujo una vez un BMW 760 blindado y nos cuenta que en la guantera central tenía un amero para ametralladora.
