En Fayerwayer: Facebook mintió sobre la audiencia y las métricas de sus videos durante dos años. En consecuencia quienes pagaron por anuncios publicitarios basándose en esos datos de audiencia están contentitos:
Según The Wall Street Journal Facebook habría inflado el alcance de sus videos durante más de dos años. Sus métricas definían como video «visto» uno reproducido por más de tres segundos, aumentando artificialmente de este modo el promedio de tiempo visto por los usuarios entre un 60% a un 80%. Esto no cayó muy bien entre quienes ponen publicidad en los videos, ya que básicamente la gente no los estaba viendo.
Facebook declaró que no fue intencional, sino un error: «Hemos descubierto un error en una de las maneras como calculamos las métricas de video. Este error ha sido reparado y no ha impactado la facturación, hemos notificado a nuestros clientes a través de nuestros productos y socios. También hemos renombrado la métrica utilizada para que se entienda mejor que es lo que medimos.»
Una solución muy «estilo Microsoft» al chiste de la bombilla: si la bombilla se funde no hace falta ninguna persona para cambiarla, simplemente redefinimos el concepto «oscuridad».
Las reacciones no se han hecho esperar:
Saber cuánto tiempo se visualiza un vídeo es clave para que las empresas decidan a invertir sus publicidades en esta red. Pero algunas firmas ya comenzaron a exponer su enfado por esta desprolijidad: por ejemplo, la multinacional francesa Publicis Media ha escrito a sus clientes exponiendo el problema, y considerando que «dos años de informes con números inflados es algo inaceptable».
No es la primera vez que se acusa a Facebook de malas prácticas o directamente de fraude en temas relacionados con la publicidad: usuarios falsos, vistas y likes pagados, vídeos inflados, desinformación… El vídeo de Kurzgesagt de noviembre de 2015 ya explicaba exactamente este problema, incluyendo cómo los vídeos Facebook los contaba como «vistos» a partir de 3 segundos incluso si estaban sin sonido. La gráfica de lo que sucede en cuanto a la «retención» real de los usuarios que miran los vídeos se puede ver en este dramático gráfico:
El dato de que esos tres segundos era un tiempo claramente insuficiente, unido a que los vídeos comenzaban a verse en «autoplay» (a menos que se desactivara en las preferencias) fue algo que ya se comentó en su día ha adquirido ahora nueva relevancia. Otro tema que acabará explotándoles en la cara será probablemente del de cómo Facebook «roba» los vídeos de YouTube, tal y como explica el vídeo de Kurzgesagt – y otras formas de apropiación de contenidos que han explicado diversos youtubers y creadores de contenidos de Internet en los últimos meses.