Este vídeo tiene más años que la tana; es una demostración del funcionamiento de la Moniac, siglas de Monetary National Income Analogue Computer: «Computadora Analógica de Ingresos Nacionales Monetarios», una peculiar calculadora «de agua» que data de 1949 y que fue inventada por el economista neozelandés William Phillips.
También conocida como Fonanzógrafo o simplemente Máquina de Phillips, la Moniac ocupaba lo mismo que un gigantesco armario de dos metros de altura y un metro cuadrado de base. En su interior había tanques para almacenar agua y diversos tubos por los que fluía el líquido cuando se abrían los grifos, además de cables, electrodos y diversas conexiones.
La Moniac realizaba una simulación de la economía de un país aplicando las «fórmulas habituales» en forma de transferencias acuáticas de unos depósitos a otros. Si se quería aumentar el gasto en Sanidad o Educación se abrían los grifos que partían del depósito del Tesoro; para rellenar las «arcas» del Estado había tubos de vuelta desde algunos lugares en forma de Impuestos, y otras cosas por el estilo. También había grandes depósitos para representar las importaciones y exportaciones. Si el agua rebosaba en ocasiones es que había un problema; en otros lugares unos electrodos activaban la salida del agua cuando se alcanzaba cierto nivel, demostrando que ciertas situaciones tienen un límite de saturación.
Todo era cuestión de manejar con delicadeza las diversas variables del modelo y la forma en que el flujo de agua iba de un sitio a otro. El resultado era una razonable simulación a grandes rasgos de la economía, que decían podía calibrarse hasta un 2% de los valores reales matemáticos. Los resultados se leían en unas marcas que había junto a los depósitos, a modo de «valor visual».
Actualmente existen algunas copias de la Máquina de Phillips y también unos cuantos simuladores, dado que se construyeron tan solo unas 14 unidades originales. La de este vídeo está en el Museo del Banco de la Reserva de Nueva Zelanda. Según parece las bases de la economía actual siguen siendo más o menos las mismas y la posibilidad de ver los «flujos del dinero» en movimiento siguen siendo igual de ilustrativos y educativos.