Esta pequeña maravilla que muestran con todo tipo de detalles en Extreme Electronics se llama Pico Cray, un chisme que han encuadrado en la «computación distribuida a pequeña escala». Está diseñado con el elegante aspecto externo del Cray-1, incluyendo su fascinante recreación asiento circular, aunque por dentro lleva tan solo 8 placas controladoras Pico de Raspberry Pi y otra adicional que sirve para supervisar a las demás, todas conectadas en paralelo.
El Pico Cray tiene una pequeña pantalla de 320 × 240 píxeles y algunos botones. De momento no hace gran cosa aunque lo importante es el concepto: el software de cada una de las placas Pico es el mismo, para que actualizarlo y operar con ellas sea más sencillo.
Como software de demostración, disponible en Github, han elegido un dibujo fractal con el Conjunto de Mandelbrot como inspiración, uno de los tradicionales problemas de cálculo que pueden distribuirse entre varios procesadores; básicamente cada vez que queda un procesador libre se le mandan unas coordenadas X-Y para que responda con el valor que corresponde.
Este precioso invento no puede de momento adquirirse, aunque dice su creador que si se lo piden a través de Extreme Kits puede que comience a venderlo en forma de kit. A mi me parece resultaría especialmente educativo seguro que superaría a las 88 unidades de Cray-1 que se vendieron del mítico superordenador. También es probablemente cientos de veces más potente que el original, aunque no se especifica el dato.
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