Ayer se hizo público el trailer final oficial de Blade Runner 2049, que se estrenará el 6 de octubre de este año en todo el mundo. Esta circunstancia lleva una década angustiando al personal, especialmente a tanta y tanta gente que considera Blade Runner la mejor película de ciencia ficción de todos los tiempos y por supuesto la mejor de la historia del cine para quienes no tienen edad de haber apreciado Casablanca, Lo que el viento se llevó, El Padrino, Cadena perpetua o –por qué no– incluso Star Wars. Por cierto que Blade Runner no se llevó ni un Óscar.
La cuestión es que la película estaba basada como todo el mundo sabe en ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas?, una novela de Philip K. Dick de la que nunca se escribió una segunda parte. Por tanto cualquier obra derivada del clásico parece algo «antinatural» y condenado al fracaso. Pero no siempre debería ser así. He aquí algunas razones:
- Han existido continuaciones de Blade Runner en forma de novela: Blade Runner 2: The Edge of Human (K. W. Jeter, 1995) de escaso éxito – tan poco que también existen una tercera y cuarta parte. Incluso la segunda novela contradice a la primera en diversos aspectos; nadie se acuerda ya de ninguna de ellas.
- También ha habido continuaciones en forma de videojuegos. Del de 1985 para Commodore, Spectrum y Amstrad ni hablamos. El Blade Runner de Westwood Studios de 1997 no era exactamente una secuela sino más bien una historia desarrolla en paralelo con la película. Aunque estaba bien para la época de los primeros juegos en CD y ganó algún premio tampoco pasó a la historia.
- Existen innumerables películas con segundas partes de las que nadie se acuerda y que en nada afectaron al original. Personalmente recuerdo la megadecepción de Los inmortales II: El desafío (auténtica basura), pero también existen versiones «oficiales» como La bella durmiente 2 (mala época para Disney con el vídeo) o Tiburón 2 (e incluso un infame Tiburón 3-D) y no han dañado más que ligera y temporalmente la mente de quienes las han visto: nada permanente.
- Hay muchas segundas partes que ni fú ni fa. Era difícil llegar al nivel de Matrix, pero Matrix Reloaded entró dentro de lo aceptable aunque la tercera parte (Matrix Revolutions) ya hundiera un poco en la miseria la historia. Otras secuelas y reboots de la época tampoco estuvieron mal años después; recordemos Tron: Legacy.
- En algunos raros casos las secuelas superan a los originales. Es cierto que es poco habitual que suceda, pero público y crítica coinciden en que ciertas sagas han tenido una mejor segunda parte que primera; ahí están Aliens, Terminator 2 o Mad Max 2. Y generalmente hasta se considera Star Wars: El imperio contraataca superior incluso a Star Wars: Una nueva esperanza o Regreso al futuro II a la primera parte, como Indiana Jones y el templo maldito a su predecesora.
El factor clave en esto de las secuelas suele ser que no estén demasiado separadas en el tiempo y que la dirección o producción se mantenga. Muchas de esas «buenas secuelas» las rodaron los mismos directores o en una época cercana (Robert Zemeckis los Regreso al Futuro, James Cameron los Terminator).
Con Blade Runner 2049 estamos a 35 años de distancia y con un director distinto – aunque es un lujo que sea Denis Villeneuve y esté supervisado por la producción de Ridley Scott, el director original. ¡Si hasta está Harrison Ford! Todo eso puede ayudar. Seamos prácticos: también El despertar de la fuerza dejó buen sabor y habían pasado más de tres décadas – a pesar de que el director era un chaval cuando se estrenó la original.
Creo que con Blade Runner 2049 puede suceder que esté tan bien como pinta el trailer, al menos deje un buen sabor de boca o como mucho «ni fú ni fa»… Pero tampoco creo que dañe irremediablemente al original ni nada parecido (difícil o imposible será que lo supere). En cualquier caso buena materia prima tiene. Y más nos vale, porque a nada que vaya bien ya estarán pronto preparando la tercera y cuarta partes… Con Harrison Ford o sin él.