Por @Alvy — 15 de diciembre de 2015
Desde el departamento de nuestros amigos los gérmenes llega esta simpática y deliciosa peliculita animada sobre un germen codicioso y lo que sucede en el pequeño e invisible de mundo estas criaturitas «tímidas y amigables, que se ayudan unas a otras» (tuberculosis aparte, ¡ejem!)
Eso sí, según el creador de la historia la animación encierra toda una parábola:
Con la «destrucción de las estructuras vivas» en la película, Greedy Germ intenta ilustrar que obtener poder siempre conlleva un efecto directo sobre la sociedad. Y abusar de ese poder, así como acatar ciegamente las órdenes, lleva inevitablemente a las injusticias sociales. La película intenta hacer ver que las elecciones de cada individuos conllevan una responsabilidad con la siguiente generación.
No me queda muy claro si la historia es capaz de dar a entender algo tan complejo, pero ese era el mensaje a transmitir.