El pasado fin de semana tuve la oportunidad de participar, invitado por Disney, en el Tron Legacy Bloggers Day, celebrado en las instalaciones de Digital Domain, donde trabajan a todo gas para terminar la secuela de Tron, una de nuestras películas favoritas de todos los tiempos.
A lo largo del día pudimos conversar un rato con diversos miembros del equipo, entre ellos Garrett Hedlund y Olivia Wilde, quienes interpretan a Sam Flynn y a Quorra respectivamente, Joe Kosinski, el director, Steven Lisberger, el director de Tron y uno de los productores de esta secuela, así como con varios miembros del equipo de efectos especiales y los encargados del diseño de vehículos, vestuario, y del look en general del universo de la película.
Con ellos fuimos hablando del proceso que ha llevado de la película original a esta, de cómo afrontaron el reto de intentar actualizar el mundo de Tron sin alienar a los fans de la película original pero aprovechando los avances en tecnología que ha habido en estos años, o de cosas como por qué ahora las motos de luz son capaces de hacer curvas y saltar por el aire mientras que antes giraban de 90 en 90 grados.
Casi treinta años de evolución en las motos del universo de Tron… Y de los ordenadores del MundoReal™ que las tienen que renderizar
Pero, con mucho, lo más interesante fueron los 23 minutos de película que nos enseñaron, pertenecientes a varias escenas.
Sin entrar en detalles acerca de lo que pudimos ver del argumento en estas escenas, seguro que no sorprendo a nadie si digo que técnicamente la película es brillante, y cuando salga a la luz el material del making of, o cuando pueda dar más detalles sobre lo que vimos, veréis cómo en ella se han llevado las tecnologías de imagen al límite, aunque con el trailer ya os hacéis una idea:
Incluso el uso de 3D, para el que se ha utilizado una nueva generación de los equipos que James Cameron usó para Avatar, y que por lo general no me ha convencido en las películas que he visto hasta ahora que lo usan, no me pareció exagerado.
Ahora bien, tampoco voy a sorprender a nadie si digo que todos aquellos con los que lo comenté nos hemos quedado con las ganas de saber algo más del argumento, pues sin un buen argumento no hay efectos especiales que valgan.
Aunque eso sí, después de haber visto lo que hemos visto, definitivamente cada vez tengo más ganas de ver Tron: Legacy.
