Este curioso rompecabezas mecánico se llama Hiperbólico 29 (Hyperbolic 29) y es una especie de variante más complicada y enrevesada del popular Juego del 15 que tiene ya más de dos siglos (y que de cuya invención intentó apropiarse el mismísimo Sam Loyd). Consiste en «mezclarlo» y luego intentar volver a la posición inicial con los números en orden. En el Hiperbólico 29 las piezas con los números no solo son casi el doble, sino que además la superficie por la que se deslizan puede hacer giros tridimensionales que se retuercen de complicadas maneras.
Tal y como puede verse hay una versión intermedia entre el 15 y el 29 que es el denominado Juego del 15+4 donde hay 19 piezas en un mecanismo similar pero más sencillo. Un mecanismo por cierto que es tan ingenioso como interesante para puzles de este tipo. Para dar forma a la idea cuenta que utilizaron software específico que funciona con geometría hiperbólica
Otro de los retos es construir el puzle, porque no se vende así tal cual, en tiendas (para desconsuelo de los coleccionistas, que si no yo ya me habría comprado uno). Hay que comprar por un lado el mecanismo (129 dólares) y por otro las 29 piezas (99 dólares) para pintarlas con cuidado; también se pueden imprimir con una plantilla 3D que hay en ThingVerse para que queden mejor. ¡Ah, y se necesitan unos tornillos y tuercas, aunque eso en comparación será lo más barato (unos 5 euros me imagino). Es un precio a todas luces desorbitado, pero es lo que tienen estos puzles tan… artesanales.
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