Unos investigadores expertos en seguridad han descubierto que de los cientos de miles de aplicaciones Android que hay por ahí un 8 por ciento más o menos transmiten la información de forma no segura. El problema es que los atacantes maliciosos pueden crear hotspots Wi-Fi para interceptar los datos y aprovecharse de ello para robar cuentas, contraseñas, datos bancarios y todo lo que circule por ahí. Muchas apps emplean incorrectamente los protocolos HTTPS/SSL/TTS así que ni siquiera eso es garantía de seguridad – además de que la mitad de la gente no sabe ni lo que significan, ni qué indican los iconos o mensajes de aplicaciones como el navegador web o las alertas sobre certificados seguros.
El estudio tiene el simpático y descriptivo nombre de Why Eve and Mallory Love Android: An Analysis of Android SSL (In)Security [PDF], algo así como «un análisis de la (in)seguridad de Android).
Los detalles más relevantes sobre sus experimentos y todo lo que han analizado los he publicado en este artículo para RTVE.es: La seguridad de los datos personales enviados a través de redes Wi-Fi y dispositivos Android, en entredicho, que incluye algunos consejos para evitar problemas serios.