No hace mucho la FAA volvió a alertar a los fabricantes de aviones de que ofrecer wifi a los pasajeros de los aviones era peligroso si la red destinada al entretenimiento estaba físicamente conectada con la red de los sistemas del avión.
Al parecer no sólo se trataría de las redes wifi, sino también de los sistemas de entretenimiento —como películas— ofrecidos a bordo, para lo cual cada asiento dispone de un acceso a los ordenadores del avión denominado SEB (Seat Electronic Box).
En Wired, Feds Say That Banned Researcher Commandeered a Plane sobre Chris Roberts, consultor de seguridad que afirma haberse colado en la red de los sistemas de varios aviones de pasajeros entre 2011 y 2014 conectándose —se sospecha— a través del SEB.
Roberts afirma que accedió a la red de los sistemas del avión durante unos quince minutos en vuelos distintos pero que no hizo nada más aparte de explorar la red y observar los datos de tráfico. Según la declaración jurada [en PDF] que tiene el FBI, sin embargo, Roberts afirma que el pasado mes de febrero tuvo brevemente el control del avión durante uno de esos vuelos.
Por ahora todas las sospechan se basan en una supuesta confesión del consultor que dice haber accedido a los sistemas del avión a través de la red disponible para los pasajeros.
Por, «el control del avión» Roberts se refiere a que afirma que pudo modificar los valores de funcionamiento de uno de los motores, provocando un breve desplazamiento lateral del avión.
Aunque su confesión resulta extraña tampoco es algo imposible. Tanto es así que Roberts tiene prohibido montar en avión y el FBI se incautó de los gadgets de Roberts al considerar qué el consultor tiene capacidad para hacer lo que afirma y tras comprobar que un conector SEB del asiento junto al que él afirmó viajar mostraba señales de haber sido «manipulado.»