Este peculiar vehículo apodado la tetera más rápida del mundo está propulsado por vapor. Mide casi ocho metros de largo y utiliza gas para calentar doce depósitos por los que pasan hasta 50 litros de agua por minuto, produciendo vapor que se inyecta en una turbina a 13.000 rpm.
De momento el «loco cacharro» está sólo en pruebas aunque teóricamente puede alcanzar más de 270 km/h, que superarán este verano –si todo va bien– los 205 km/h que son el actual récord para vehículos de este tipo y que es una marca que data ni más ni menos que de 1906.
Además de ser bastante ecológico, un bonus del invento es que al superar los 140 km/h permitiría viajar al futuro en un vehículo de vapor, todo un avance en máquinas del tiempo con clase.
(Vía Gizmodo donde hay muchas más fotos.)