Por @Alvy — 8 de agosto de 2009
Esta holografía táctil combina de forma ingeniosa imágenes en tres dimensiones con técnicas de análisis visual que permiten interactuar con ellas. Además incorpora unos generadores de ultrasonidos que producen pequeñas fuerzas concentradas en lugares concretos. El resultado: un holograma que se puede «tocar» y con el que se puede interactuar. De aquí a la holosección del Enterprise 1701-D sólo hay un paso.
(Vía Coolest Gadgets.)