Por Nacho Palou —
La portada de la revista Esquire de este mes de octubre tiene una pequeña zona de papel electrónico, un tipo de pantalla de cristal líquido pero mucho más fina y flexible.
Es ingenioso cómo combina elementos estáticos de color para disimular que la pantalla es en blanco y negro –y cómo algo que hace no mucho parecía «del futuro» hoy es «de usar y tirar».
Eso si, el día que su uso sea habitual y la tinta líquida ocupe toda la superficie de la portada los quioscos van a parecer árboles de navidad –y habrán de ser evitados por los epilépticos.
(¡Gracias Gali por enviarlo!)