El proyecto SpaceDiver en el que participa la compañía OrbitalOutfitters –dedicada al desarrollo y construcción de materiales para utilizar en el espacio– pretende construir un traje que permita saltar, como poco, desde 36.500 metros de altura.
El récord lo tiene actualmente el Capitán Joseph W. Kittinger, (~30.000 m, en 1960).
Sin embargo, el objetivo del proyecto SpaceDiver no es batir récords, sino construir un sistema completo que permita a los seres humanos realizar una evacuación desde naves especiales suborbitales para que, en caso de emergencia, puedan volver a la Tierra sanos y salvos. En un salto desde esa altitud el traje es la clave ya que a esas alturas o mayores el entorno es bastante hostil: falta la de presión y oíxgeno, las temperaturas son extremas y la fricción y la enorme velocidad que se llega a alcanzar durante la caída –varios cientos de kilómetros por hora– pueden causarte un buen disgusto.
Por tanto, el traje debe proporcionar soporte vital a más de 150 Km de altura (más allá del límite tradicionalmente aceptado que diferencia entre la atmósfera y el espacio, a unos 100 Km de altura) durante 15 minutos, pero a la vez debe ser ligero (menos de 20 Kg), permitir el uso de un paracaídas y ofrecer libertad de movimientos, entre otras consideraciones que es necesario tener en cuenta.
(Vía Wired Science.)