Desde el comienzo de la crisis nuclear en Japón se ha planteado el uso de robots que pueda ayudar en las tareas de la central nuclear de Fukushima, especialmente en aquellos lugares de difícil acceso o en los que la radiación es demasiado alta para los humanos.
En general la electrónica de los robros tampoco se lleva muy bien con la radiación, y los gruesos muros de las centrales nucleares son un obstáculo para la señal de radio que los controla. Incluso “en un edificio intacto una simples escaleras o una puerta cerrada pueden convertirse en obstáculos insalvables para cualquier tipo de robot comercial”.
De todos modos, tal y como se puede ver en este vídeo (vía CrunchGear) aunque estos robots "se espera" que resistan una acumulación de radiactividad de 20 Sv –el doble de la dosis letal para el hombre– no son muy ágiles, ni se mueven como para una prisa.