Por Nacho Palou — 25 de noviembre de 2009
Foto cortesía (cc) de Andrew Magill
A raíz de la comparación de ¡Esto es precisión!, cgredan nos envió el enlace Where Do Hard Drive Heads Come From? en el que se habla del proceso de fabricación de los discos duros y de la precisión de funcionamiento del cabezal de lectura y escritura de éstos, el cual planea sobre los platos del disco a 40 átomos de altura.
Comparativamente, si la cabeza del disco fuera un Boeing 747 y los platos fueran la Terra,
Volaría a una velocidad 800 veces la del sonido, a menos de un centímetro del suelo, contaría cada brizna de hierba, cometería menos de 10 errores irrecuperables para una superficie del tamaño equivalente a Irlanda.
¡Wow!