Las zapatillas desarrolladas por investigadores alemanes disponen de dos mecanismos electromagnéticos en el talón capaces de producir electricidad a partir de movimiento que hace el pie al caminar, tanto al apoyar el talón en el suelo como al levantarlo.
La cantidad de electricidad no es mucha. De hecho es ridícula —tres o cuatro milivatios como mucho— así que nada de utilizarlo para cargar el móvil, al menos por ahora. Pero sí puede ser suficiente para hacer funcionar pequeños sensores y dispositivos, por ejemplo aquellos relacionados con la salud.
Esa cantidad de electricidad también pueden alimentar sensores de movimientos y acelerómetros que permiten hacer un seguimiento o asistir a la navegación en interiores —donde no hay cobertura GPS, vía BBC.