Hace unas horas el Airbus A321 con matrícula HL7763 de la aerolínea Air Busan se incendiaba en Aeropuerto Internacional de Gimhae en Corea del Sur mientras se preparaba para la partida.
El avión ha resultado destruido. Pero las 176 personas que había a bordo –169 pasajeros, seis tripulantes y un técnico de mantenimiento– han podido evacuarlo con solo dos personas con heridas leves. El avión había sido entregado a Asiana Airlines en noviembre de 2007 y había pasado a Air Busan en junio de 2017.
Parece ser que el fuego se originó en los maleteros de la parte posterior del avión pero aún no se sabe qué lo causó. En cualquier caso la rápida reacción de la tripulación, que consiguió evacuarlo antes de que las llamas se vieran desde el exterior, evitó males mayores. Habrá que esperar al análisis por parte de las organizaciones competentes para aclarar la causa del incendio.
Hay que destacar que en las imágenes que van saliendo apenas se ve a nadie que se haya llevado consigo el equipaje de mano, un comportamiento incívico e irresponsable demasiado habitual a la hora de evacuar un avión en una emergencia.