Boeing acaba de anunciar que su junta directiva ha escogido a Robert K. «Kelly» Ortberg como su nuevo director ejecutivo y presidente. El nombramiento tendrá efecto el próximo 8 de agosto.
Ortberg, de 64 años, es licenciado en Ingeniería Mecánica por la Universidad de Iowa. Según la nota de prensa publicada por la empresa
[…] aporta más de 35 años en posiciones de liderazgo en el sector aeroespacial. Comenzó su carrera en 1983 como ingeniero en Texas Instruments, y después se incorporó a Rockwell Collins en 1987 como director de programa. Allí ocupó puestos de liderazgo cada vez más importantes en la empresa antes de convertirse en su presidente y CEO en 2013. Tras cinco años al frente de Rockwell Collins, dirigió la integración de la empresa con United Technologies y RTX hasta su jubilación de RTX en 2021. Ha ocupado una serie de importantes puestos de liderazgo en la industria, incluido el de miembro del Consejo de Administración de RTX. Además, forma parte del Consejo de Administración de Aptiv PLC, una empresa tecnológica global y líder del sector en arquitectura de sistemas para vehículos. Fue Presidente de la Junta de Gobierno de la Asociación de Industrias Aeroespaciales (AIA).
Sustituye en el cargo a Dave Calhoun, quien a su vez heredó el puesto de Dennis Muilenburg, a quien le costó el puesto la crisis del 737 MAX. Pero Calhoun no fue capaz de enderezar el camino de la empresa, o no del todo, y a él le costó su puesto otro problema con el MAX, en concreto el que uno de los aviones de Alaska Airlines perdiera un tapón del fuselaje en pleno vuelo a principios de enero de este año.
Aunque el incidente con el avión de Alaska Airlines en realidad fue la gota que colmó el vaso. Y es que a Boeing tampoco le va muy bien con la cápsula espacial Starliner, el cohete SLS por mucho que la misión Artemisa I haya ido bien, o el avión nodriza KC-46 por citar algunos de los programas con problemas de la empresa.
Calhoun ha presentado ya su renuncia al puesto en la junta directiva, que dejará también el 8 de agosto. Aunque seguirá sirviendo como asesor hasta que se retire de la empresa el 1 de marzo de 2025.
La edad de jubilación como director ejecutivo de la empresa es de 65 años. Pero la junta directiva ha decidido que no se aplique a Ortberg hasta abril de 2031, lo que le da casi siete años para cumplir con sus objetivos. Aunque esto, por supuesto, no quiere decir que vaya a durar siete años en el cargo. Pero por de pronto este año cobrará 17,25 millones de dólares y el próximo 22 millones.
Una de sus primeras decisiones ha sido anunciar que se instalará en Seattle, lo que señala una apuesta por la vuelta a los orígenes de la empresa. Otro paso importante en ese sentido sería que volvieran a centrarse en hacer aviones y no en los beneficios para los accionistas. Pero esto puede ser mucho más complicado, como bien podrían atestiguar Muilenburg y Calhoun.
También le tocará gestionar la vuelta al redil de Spirit AeroSystems, uno de los principales proveedores de la empresa que hasta 2005 era parte de ella.