Por @Wicho — 24 de enero de 2020

Mientras SpaceX con su constelación de satélites Starlink –ya es la mayor operadora de satélites del mundo– y otras iniciativas como Oneweb o el proyecto Kuiper se lanzan a conquistar la órbita baja y media terrestre hay una propuesta que parece que no acaba de despegar, la de los pseudosatélites.

Un pseudosatélite es una aeronave diseñada para permanecer en el aire durante largos periodos de tiempo en la estratosfera. Así no interfiere con el tráfico de los aviones y el viento y las nubes no la afectan. En ella se puede montar un conjunto de sensores y equipos de radio que le permiten hacer funciones similares a las de un satélite, sólo que a una fracción del coste, entre otras cosas porque se ahorra el coste del cohete que lo ha de poner en órbita y tampoco tienes que estar pendiente de que haya disponibilidad de espacio en un lanzamiento. Además lo puedes hacer aterrizar de vez en cuando para hacer mantenimiento y/o reparaciones y volver a hacer que vuele.

Ejemplos de pseudosatélite son el Zephyr de Airbus, el Aquila de Facebook o los globos Loon de Google. Pero como decía antes todos llevan años en pruebas sin realmente haberse ido más allá.

Impresión artística de un Stratobus – Thales Alenia Space
Impresión artística de un Stratobus – Thales Alenia Space

Presentado en 2014 el Stratobus de Thales Alenia es otro de estos vehículos. Con una longitud de 115 metros, un diámetro máximo de 33, y un peso de 7 toneladas es capaz de levantar una carga útil de 250 kilos a 20 km de altitud y de suministrarle hasta 5 kW de potencia para su funcionamiento gracias a sus paneles solares. Aunque esos 5 kW tienen que ser compartidos con los motores que usa para mantener la posición. Está diseñado para misiones de hasta cinco años con mantenimiento anual.

Su desarrollo comenzó en 2016 pero como el de otros vehículos similares no parecía avanzar mucho. Sin embargo Thales Alenia Space acaba de firmar un contrato con el ministerio de defensa francés para un estudio de concepto de un Stratobus adaptado a las necesidades del ejército que, si es aprobado, dará lugar a la construcción de un demostrador que haría su primer vuelo a finales de 2023.

O no.

Compartir en Flipboard Publicar / Tuitear Publicar