Por @Alvy

Las sillas de Star Trek: comodidad y diseño en el espacio

Yo internet lo pago por esto: unos tipos se han dedicado a repasar todos los episodios de Star Trek y catalogar minuciosamente todas las sillas y sillones que pueden identificarse, en especial todas las que se pueden comprar y forman parte de alguna línea de diseño decorativo. Tan ímprobo trabajo puede verse en Commercially Available Chairs in Star Trek, una sección de Ex Astris Scientia, que es como una Wikipedia del frikismo extremo sobre Star Trek.

La base de datos incluye más de 180 modelos. Hay algunos de diseñadores tan conocidos como Philippe Starck y los modelos van desde los sillones de los puentes de mando y secciones técnicas de las naves como las de los alojamientos e incluso las que pueden encontrarse en viviendas de lejanos planetas.

Si lo piensas, se necesitan muchas sillas y sillones para la infinidad de decorados que hay que montar. Así que muchos sillones se utilizan tal cual, sin modificaciones, aunque algunos están tapizados o con algún añadido para que encaje mejor con la estética de la franquicia. Uno que me pareció precioso es el Serpentine Sectional, un gigantesco sofá curvo que estaba en el despacho de la Consejera Troi en La Nueva Generación.

Uno de los modelos más sencillos y reconocible es el Burke 115 de Star Trek: la Serie Original (¡a quién se le ocurre poner sillones sin cinturón en el puente de mando de una nave espacial!) También aparecen otros como el sillón Barcelona en Voyager y la Artifort F300 en La Nueva Generación. Teniendo en cuenta todas las series y temporadas que abarca Star Trek es normal que haya sillas y sillones de las más peregrinas procedencias; por haber hay hasta sillas de IKEA en el siglo XXV, com la silla Pajala en un par de episodios de Espacio Profundo 9 y el popular taburete Janinge en otro.

A mi la verdad es que me ha producido una extraña sensación recorrer estas fotos y ver cómo se usaban en las imágenes de las series. Ya no puedo pasar por una tienda de muebles sin imaginarme si los sillones y sillas encajarían adecuadamente en alguna de las series de Star Trek. Otra demostración de que internet es tan grandioso como nuestra galaxia.

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Por @Alvy

¡Que se preparen los diseñadores gráficos, Piskel llega para revolucionar el mundo del pixel art!

Piskel es un editor de sprites, que, para quien no lo sepa, son los pequeños objetos y personajes que se usaban en los antiguos videojuegos porque no requerían sobrecargar la CPU dado que los chips gráficos los gestionaban directamente. Me ha sorprendido leer en la enciclopedia que el término sprite lo popularizó el mismísimo Jay Miner (que trabajó en Atari, Commodore y con los Amiga).

A falta de algo mejor que hacer y de formas de conseguir aplicaciones, juegos y utilidades para nuestros ordenadores, en aquellos tiempos (años 80) los que nos iniciábamos con los Commodores, Amigas y MSX solíamos desarrollar nuestras propias herramientas: editores de tipografías, de mapas de escenarios y también de sprites. No era raro comprar una revista en el quiosco cuyo titular de portada era «Editor de sprites». Crear los sprites era un trabajo metódico y delicado. Cuantas más limitaciones tenían, más creatividad hacía falta. Esto se complementaba con técnicas para poder usar más sprites de los que proporcionaban los chips gráficos, por ejemplo moviéndolos rápidamente antes de que llegara el barrido vertical de la pantalla, o reemplazándolos por mapas de bits estáticos en momentos clave.

Piskel me ha recordado un poco aquellas herramientas, porque utiliza muchas de las mismas ideas: lápices, paletas de colores, herramientas para borrar, rellenar, trazar líneas, dibujar cuadrados y círculos… Todo con unos píxeles grandísimos, gordos como puños, como mandan los cánones. Naturalmente aquí las herramientas son un poco más avanzadas: hay selección de zonas para desplazar, brillo y contraste, tramado (dithering) y otras.

Para la navegación por los distintos fotogramas (frames) que componen el sprite se puede variar la velocidad (FPS), usar capas, clonados y otras transformaciones. También hay un buen gestor de paletas de color y se pueden ampliar y reducir imágenes. Lo más interesante es quizá poder importar y exportar GIF animados, además de PNG y JPEGs. Además, como buena herramienta, incluye decenas de atajos de teclado para hacer el trabajo repetitivo más ágil. Incluso se pueden personalizar.

Mientras se trabaja con el sprite se pueden ver todos los frames y también el resultado ya animado, para que resulte todo más cómodo y visualmente fácil de apreciar. ¡Ah! Y el código fuente de Piskel es abierto y está disponible en Github, junto con referencias a todas las librerías que se usan, que no son pocas y también muy interesantes. La de maravillas que hubiéramos hecho en los viejos tiempos con un editor tan rápido y potente como este. ¡Larga vida a los sprites!

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Por @Alvy

Un archivo de diseño para teletransportarse al pasado de Nokia (años 1992-2014)

El Nokia Design Archive es un archivo interactivo creado por investigadores de la Universidad Aalto en Finlandia. En él se recopilan más de 700 entradas visuales curadas a partir de miles de elementos donados por Microsoft Mobile Oy, la división de lo que otrora fue Nokia cuando Microsoft la adquirió. Contiene más de 20 años de la historia del diseño de Nokia, algunos muy conocidos porque eran aparatos que todos veíamos –o manejábamos–– pero también otros menos visibles.

Nokia Design ArchiveEl archivo tiene una licencia libre Creative Commons y permite explorar tanto las experiencias de los diseñadores, como ciertos temas relacionados con los productos y la tecnología móvil. En una visualización muy elegante de red con conexiones, cada nodo representa un producto o tema y las líneas enlazan con otros productos o temas de algún modo relacionados. ¿Qué mejor forma de entender cómo se conectan todas las piezas del puzle?

También hay una cronología con la información de los más de 300 diseñadores que trabajaron en Nokia Design, incluyendo fotografías de época, anécdotas, entrevistas y otros datos. Del 40 por ciento, más o menos, hay biografías completamente documentadas.

Los elementos individuales en forma de presentaciones, objetos, informes, imágenes, dibujos o vídeos suman más de 700 entradas curadas y con toda la información revisada, pero todavía queda mucho trabajo que hacer: el archivo completo incluye más de 20.000 entradas sin curar y ni más ni menos que 959 GB de archivos digitales. Cuando ha sido posible se han organizado en colecciones.

Esto es solo la versión web, porque también existe la «versión física» de los Archivos en la Universidad Aalto, en Finlandia. Un material excepcional para usar en investigación, educación y fines museísticos. Todo lo que se pide es la atribución del origen, mencionando al diseñador o diseño, el año y un enlace al repositorio.

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Por @Alvy

«Detectar patrones oscuros» en forma de juego, algo que todo el mundo puede y debería aprender

¿Sabes cuánta gente cae en los engaños que incorporan muchas webs en sus diseños e interfaces? ¿Cuánto tiempo, dinero y frustración causan? Con Dark Patterns Detective se aprender cómo se ha convertido navegar por una web en un penoso calvario para cancelar una suscripción, rechazar una oferta o comprar cualquier producto. Son los Dark Patterns («patrones oscuros») del Dark Design («diseño oscuro»). Y es que definitivamente El enemigo conoce el sistema, como decía aquel altamente recomendable libro de Peirano, donde se examinaban estos y muchos otros temas relacionados.

Esto es un juego online, pero utiliza patrones oscuros reales típicos de muchas webs: botones cambiados de sitio y colores, productos «opcionales» que se añaden a los carritos automáticamente, ofertas que no son tales sino que buscan quedarse con tus datos, mensajes para que te apresures y ofertas que mágicamente «ya no están disponibles» cuando las eliges… En fin, una trapacería tras otra.

En total hay ocho pruebas que superar, a partir de la explicación del escenario inicial de cada una de ellas, tareas como «comprar un ordenador en oferta», «cancelar una suscripción» o «configurar las preferencias de una app».

Estos patrones oscuros producen todas estas situaciones:

  • Renovaciones no deseadas
    • Dificultad para cancelar suscripciones.
    • Procesos de cancelación complejos que hacen perder tiempo.
    • Suscripciones que se mantienen «accidentalmente».
  • Presión psicológica y manipulación
    • Presión a los usuarios para realizar compras no deseadas.
    • Crear expectativas de precios poco realistas.
    • Generar culpa o ansiedad de forma innecesaria.
    • Explotación de diversas vulnerabilidades psicológicas.
    • Toma de decisiones mal informadas o apresuradas.
    • Ansiedad y estrés.
  • Impacto económico
    • Gastar dinero en servicios no deseados.
    • Compras apresuradas que generan arrepentimiento.
    • Afectar especialmente a consumidores vulnerables.
  • Pérdida de confianza
    • Dañar la confianza en las compras en línea.
    • Percepción negativa de las marcas.
    • Pérdida de confianza en el servicio/medio/tienda.
  • Frustración del usuario
    • Sentirse frustrado o manipulado al descubrir el «truco».
    • Conflictos con el servicio de atención al cliente.
    • Frustración al intentar contactar con el equipo de soporte.
  • Violaciones de privacidad
    • Compartir datos personales sin consentimiento.
    • Seguimiento persistente en diversos dispositivos.
    • Violaciones de privacidad, por ejemplo a través de «clubs de socios».
    • Creación de perfiles detallados de comportamiento no deseados.
    • Pérdida de control sobre la información personal.
  • Consecuencias inesperadas
    • Cargos imprevistos, renovaciones no deseadas, problemas económicos.
    • Abandono de compras debido a los «trucos de interfaz».

La lista de pufos es tan grande que es difícil saber cuál de todos ellos tiene más impacto. Probablemente la dificultad de cancelación sea de las primeras, lo cual además está permitido por las tiendas de apps y donde las entidades oficiales responsables «hacen la vista gorda», como quien dice. La frustración está también clara, porque cada navegación se convierte en una especie de «juego de esquivar las bombas». Y finalmente, y no por ello menos importante, el impacto psicológico que supone el estrés, ansiedad y culpa que acaba afectando a todo el mundo, pero especialmente a los colectivos más vulnerables, que para su desgracia muchas veces no consiguen resolver su problema y tampoco tienen de quién obtener ayuda.

Merece la pena dedicarle cinco minutos a este Dark Patterns Detective y mostrárselo a quienes puedan encontrarse con estas situaciones. Es una pena que sólo esté en inglés, pero quizá con un traductor automático pueda servir incluso para los que no hablan la lengua de Shakespeare. Y, como decía el sargento Jablonski, ¡Tengan mucho cuidado ahí fuera!

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