Photogradient es una curiosa e intrigante herramienta que sirve para crear degradados. Pero no son sencillos degradados lineales y circulares: son degradados en malla (mesh) y se pueden modificar los puntos que generan las curvas por las que se «deslizan los colores». Es obra de Daniel Destefanis.

Los colores del degradado se obtienen a partir de cualquier imagen que se suba, ya sea una fotografía u otro tipo de diseño. La app extrae los colores dominantes, que aparecen en la paleta y se pueden reordenar o incluso añadir más o menos… De hecho se podría conseguir una suerte de degradado lineal dejando únicamente dos colores, aunque serán más originales cuantos más colores haya.

Además de esto hay otra opción para cambiar la «forma de la onda» y el tipo de curva del degradado: con ruido, suave, Voronoi… Todo esto hace de la herramienta toda una curiosidad con la que ir experimentando y jugando. Un uso que se me ocurre es generar fondos para las fotografías o vídeos en vertical, de modo que el relleno que quede en los laterales al menos tenga cierto parecido y «haga juego» con el contenido.

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Si eres de quienes aprecian las interfaces inventadas que se ven en películas, series y videojuegos te encantará Interface Love, una web donde se recopilan decenas de ellas con bastante detalle a nivel de imágenes y también de organización.

Entre otros están universos como los de las sagas de Alien, Star Wars, Blade Runner o películas como El quinto elemento, Total Recall o Minority Report, y también de anime, con Evangelion, Halo o Ghost in the Shell. Además hay videojuegos como Starcraft 2, Destiny o Batman: Arkham Asylum. Entretenimiento para rato no falta, vamos.

Todo esto se puede consultar por categorías organizadas alfabéticamente, desde Análisis a Warnings. Basta ir eligiendo en los menús para luego acceder con un clic a fotogramas sobre cómo tratan el tema las películas, juegos y series. Es todo un mundo sobre cómo se entiende en cada universo la relación humano-computadora, con toques ingeniosos como presentar las bases de datos de los replicantes en el caso de Blade Runner) o la selección de misiones en los videojuegos de Star Wars.

Mis favoritas: probablemente las de la saga Alien (1979) de las más completas y consistentes, plagada de lo que denominan «funcionalidad plausible» y probablemente la de la elegante y monocromática Moon (2009), gran película por cierto donde las haya. También me debato entre poner como mejores o peor la de 2001, una odisea del espacio, porque como interfaz no es gran cosa ni ha aguantado bien el tiempo, pero estéticamente es una maravilla retro también, incluyendo detalles como las geniales instrucciones bajo algunos paneles… ¿No se supone que habían estudiado para astronautas?

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1984. Un revolucionario ordenador está a punto de ver la luz y una diseñadora ha de responsabilizarse de todo el trabajo relacionado con un novedoso mundo de iconos, tipografías y gráficos en algo nuevo que se daría en llamar «interfaz gráfica», que provenía del Xerox PARC. Esa mujer era Susan Kare. El resto es historia.

Ahora en ChicagoKare.xyz se rinde un pequeño homenaje a Chicago, una de las más emblemáticas fuentes en mapa de bits que incluyó el Macintosh en su primera versión. Su aspecto sumamente pixelado y alta legibilidad la hicieron ser también la tipografía elegida para la pantalla del primer iPod. Luego existieron versiones vectoriales, con curvas y otros refinamientos.

Con el tiempo se ha convertido en una tipografía de culto, con gente que intenta encontrarla de forma anacrónica en películas y series que muestran el mundo antes de 1984 y homenajes espontáneos. ¡Larga vida a Chicago!

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Hace unos días la Agencia Espacial Española (AEE) presentaba su identidad visual, que incluye su nuevo logo. Ese que puedes ver ahí a la derecha. Pero llega envuelto en polémica porque no es el que había sido escogido originalmente.

La AEE convocó un concurso en 2022 para el diseño de su identidad visual. Ese concurso lo gestionó la Red Española de Asociaciones de Diseño (READ) y lo ganó una propuesta conjunta de las agencias Rubio & del Amo y Cruz mas Cruz. En palabras del jurado «por sus opciones de comunicación presente y futura» y por ser «una identidad que impacta visualmente, convive adecuadamente con las identidades de otras agencias espaciales y tiene capacidad para perdurar en la mente».

Pero el proceso de implantación quedó detenido con la convocatoria de elecciones generales en verano de 2023. Y ya no siguió adelante pues ese mismo verano, tras su nombramiento como director de la agencia, Juan Carlos Cortés Pulido decidió poner de nuevo en marcha el proceso de selección aduciendo que el escogido no le gustaba ni a él ni a su equipo.

El encargo de diseñar el nuevo lo recibió Myway Spain, que es una plataforma que aglutina a un «grupo de profesionales independientes con más de 20 años de experiencia en agencias de publicidad». Pero no una agencia propiamente dicha. Y tampoco está muy claro cómo se encargó y adjudicó este nuevo diseño.

Las agencias ganadoras del concurso original han exigido explicaciones tras el cambio. READ tampoco está muy contenta.

El nuevo diseño tampoco parece convencer a quienes saben de esto como por ejemplo César Astudillo o Fernando de Córdoba. Quienes no tienen nada claro, por ejemplo, eso de la convivencia adecuada con las identidades de otras agencias espaciales. Aunque tras su presentación oficial es altamente improbable que se vaya a cambiar por muchas protestas que haya.

Pero como no podía ser de otra forma ahora lo que todo el mundo quiere es ver el logotipo que había ganado originalmente, claro.