Por @Alvy — 8 de noviembre de 2007
La «pobre víctima» es el puntito rojo, los otros son sus… «amigos».
Según un estudio matemático realizado por unos físicos, la extensión y velocidad de propagación de un cotilleo depende de cuántos amigos tenga la víctima del rumor.
A veces hay que calcular científicamente hasta lo que parece obvio. Spreading gossip in social networks es el artículo original para quien quiera «cotillearlo»; lo más importante está explicado en castellano en Propagación de cotilleos en redes sociales (NeoFronteras).
(Rumor visto en Hispaciencia a quien se lo contó NeoFronteras.)