Según cuenta Le parisien en Remboursement de l’homéopathie: des réponses attendues en février el gobierno de Emmanuel Macron, a través de su ministra de sanidad, ha pedido a la Comisión de transparencia de la Haute Autorité de Santé, Alta Autoridad de Salud, que evalúe la eficacia de la homeopatía y si se justifica que la seguridad social del país siga pagando un 30% de su precio.
Al parecer hasta un 33% de los franceses recurre a ella –según los datos de Le parisien– lo que genera unos gastos anuales de 205 millones de euros al año a la seguridad social francesa, dinero que, en mi opinión, estaría mucho mejor invertido en tratamientos de verdad.
El Reino Unido hizo un análisis similar y desde el 3 de abril de 2018 no se pueden recetar productos homeopáticos con cargo al NHS, el National Health Service, el equivalente británico a la Seguridad Social. Habrá qué ver a qué conclusión llegan en Francia. La Comisión tiene hasta febrero para dar su respuesta.
