Por @Wicho — 11 de mayo de 2006

A poco que hayas leído la prensa estos días o que hayas visto los telediarios te habrás topado con la noticia de las excavaciones que acaban de comenzar unos arqueólogos con la intención de averiguar si bajo una colina próxima a la aldea de Visoko en Bosnia se halla una pirámide, como por ejemplo cuentan en:

O en muchos otros sitios que puedes encontrar vía Google News.

Según el promotor de las excavaciones, Semir Osmanagic, habría no sólo una sino cinco pirámides en la zona, la mayor de ellas sería más grande que la de Keops en Giza, y habrían sido erigidas alrededor del año 12.000 A.C.

El problema es que en todos los medios están reproduciendo las notas de prensa que va enviando este señor sin pararse a mirar un poco quién es, y es que resulta ser el mismo que ha publicado un libro titulado The World of the Maya (El mundo de los Maya) en el que escribe joyas como esta:

Los relojeros comunes reparan nuestros relojes y los ponen de acuerdo con el tiempo terrestre. Mi teoría es que los Mayas deberían ser considerados relojeros del cosmos cuya misión es ajustar la frecuencia de la Tierra y ponerla de acuerdo con las vibraciones de nuestro Sol. Una vez la Tierra comience a vibrar en armonía con el Sol, la información será capaz de viajar en ambas direcciones sin límites. Y entonces seremos capaces de comprender por qué todos los antiguos adoraban al Sol y le dedicaban a éste sus rituales. El Sol es la fuente de toda vida en el planeta y la fuente de toda la información y conocimiento. …Y con una frecuencia en armonía, la Tierra será, a través del Sol, conectada con el centro de nuestra galaxia. Estos hechos se harán excepcionalmente importantes cuando nos demos cuenta que nos estamos acercando rápidamente a Diciembre de 2012, una fecha que los Mayas habían marcado como el momento de la llegada del Cúmulo de Energía Galáctica que nos iluminará.

Los descendientes de los Mayas, los indios Lacandon en Chiapas fueron descubiertos a mediados del siglo XX. Esta aislada comunidad demostró una similitud sorprendente con los Vascos y los Bereberes (muy probablemente descendientes de los nativos de la Atlántida)… En el libro sagrado de los Mayas, el Popol Vuh, hay descripciones de viajeros cósmicos, el uso de la brújula, el hecho de que la Tierra es redonda, y conocimientos de los secretos del Universo.... Los jeroglíficos Mayas nos cuentan que nuestros ancestros vinieron de las Pléyades... llegando en primer lugar a la Atlántida donde crearon una civilización avanzada.

Muchas culturas de todo el mundo, desde la India, Sumeria, Egipto, Perú, los Indios del Norte y América Central, los Incas y los Mayas, se llaman a sí mismos "Hijos del Sol” o los “hijos de la luz”. Sus ancestros, las civilizaciones de Atlántida y Lemuria, erigieron los primeros templos en puntos de gran energía del Planeta. Su función principal era servir como puertas a otros mundos y dimensiones.
¡Vaya! Parece que con los magufos hemos topado (por si alguien lo dudaba).

Hay mucha más información acerca de este señor, sus teorías, y por qué no son plausibles (sin necesidad de entrar en rollos de extraterrestres) en La conexión Bosnio-Atlante, la traducción que acaba de pubicar Astroseti del artículo The Bosnia-Atlantis Connection de Mark Rose, el director de Archeology, la revista del Archaeological Institute of America.

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