Bosch está desarrollando una especie de cohetes que, situados en los laterales de las motocicletas, reducen la posibilidad de caída por deslizamiento; por ejemplo si en un curva las ruedas de la motocicleta resbalan al pisar grava suelta, hojas o una mancha de aceite en el asfalto.
En ese caso y antes de que el piloto pierda el control de la motocicleta un sensor detecta el patinaje lateral de las ruedas, y si supera un valor determinado libera el gas acumulado en un depósito, de forma parecida a como funcionan los airbags en los turismos.
El gas fluye a través de un boquilla con la fuerza y dirección adecuadas para contrarrestar la fuerza de caída en sentido opuesto mantener la motocicleta en la pista.
Imagen: Bosch.