En The Verge, Dark Horse: the story of a record-shattering, all-electric ’68 Mustang,
Los superdeportivos más caros del mundo alcanzan los 100 km/h desde parado en menos de 3 segundos. El Venom GT lo hace en 2,7 segundos; el Lamborghini Huracán con motor V10 de 602 CV, en 2,5 segundos. Si estuvieras a bordo de un Huracán pasarías de 0 a 100 km/h en menos tiempo del que necesitas para leer esta frase. Pero en algún garaje de Texas hay un extraño vehículo que es todavía más rápido: un Mustang ‘fastback’ de 1968 conocido como Zombie 222, que es totalmente eléctrico.
Construido por Mitch Medford, el Zombie 222 es un muscle car clásico convertido en un coche eléctrico que acelera de 0 a 100 km/h en 2,4 segundos gracias a su enorme par motor. Para que un motor de combustión entregue la cantidad máxima de par el motor primero debe revolucionarse y subir de vueltas — hasta las 6.500 revoluciones por minuto en el caso del Lamborghini Huracán.
Pero cuando se trata de motores eléctricos el par se libera en cuanto se hunde el pedal del acelerador en el suelo, lo que porporciona una aceleración casi instantánea. Incluso un coche eléctrico como este pequeño y en apariencia inofensivo BMW i3 tiene una salida fulgurante desde parado (de 0 a 50 km/h en poco más de 2 segundos) más propia de una motocicleta que de un coche.
Eso sí, el Zombie 222 está hecho para divertirse correr, así que prescinde te todo tipo de lujos y comodidades, cuesta unos 200.000 euros y su autonomía es de unos 80 km.
También de The Real Thing es un fenomenal vídeo sobre la restauración de un Mustang de 1969.