Centro Internacional de Diseño de Saint-Etiene. Imagenes: The Architectural Review.
Me gusta la paradoja de este edificio de la ciudad francesa Saint-Etienne. Una antigua fábrica de armas es ahora el Centro Internacional de Diseño, dedicado a la investigación y a la educación. Pero es también una mezcla indistinguible de eficiencia enérgetica y arte, firmada por el estudio de arquitectura Lin
La fachada está formada por 14.000 triángulos equiláteros de distintos materiales, con paneles solares hábilmente dispuestos para que luzcan en vez de camuflarse.
El conjunto regula los flujos de luz, aire y temperatura según las necesidades del interior. Un interior cuya estructura está pensada para librarlo de apoyos intermedios y divide los espacios en unidades independientes, que aprovechan al máximo la energía entre ellas. El resultado: Un efecto futurista que ya está aquí.
(Vía Fastcompany)