Una idea derivada de un sistema diseñado para recargar las baterías de robots de exploración submarina podría ser aplicada en centrales maremotrices y undimotrices para hacerlas más seguras y fáciles de mantener.
El sistema en cuestión, diseñado por dos empleados del Jet Propulsion Laboratory, utiliza el movimiento del agua en forma de corrientes submarinas, olas, o la corriente de un río, para hacer girar unas turbinas que, a su vez, actúan sobre una bomba hidráulica que presuriza un líquido. Este líquido a alta presión se transporta mediante unas tuberías a tierra, donde hace girar las turbinas de una central hidroeléctrica tradicional para producir electricidad.
La ventaja de este sistema es que en él, a diferencia de los que hay instalados hoy en día para aprovechar la fuerza de las olas o del movimiento del agua, todas las partes eléctricas estarían en tierra, con lo que no se verían sometidas a los problemas de corrosión intrínsecos de estar instaladas en el agua ni a los problemas de mantenimiento y de seguridad que supone el hacer circular electricidad por cables submarinos.
El líquido a presión podría ser además agua dulce, con lo que de ser mantenida en un circuito cerrado y luego convenientemente reciclada no produciría ningún impacto medioambiental en el mar o en el río en el que se instalara el sistema, y aún en caso de producirse una fuga tampoco supondría un problema grave.
Por ahora el sistema propuesto es sólo una idea, pero se están llevando a cabo los correspondientes estudios de ingeniería y de eficiencia en cuanto a lo que costaría cada kilowatio producido, pero de ser satisfactorios la idea es seguir adelante con el desarrollo.
Más información en Turning the Tide to Energy: New Concept Could Harness the Power of Ocean Waves.