Esta Calculadora de huella de carbono permite comprobar a cuántos kilos o toneladas de CO2 –emisiones contaminantes– actividades comunes como conducir un coche o mantener encendido el televisor del hogar.
Se puede probar con una actividad en particular, como por ejemplo un viaje, o con la actividad cotidiana a lo largo de todo un año. El resultado puede sorprender un poco.
Hay diversas pestañas de modo que se pueden introducir cuantos detalles hagan falta: medios de transporte, fuentes energéticas utilizadas en la vivienda (electricidad, gas natural, gasóleo… ¡incluso madera!) y se pueden incluir fácilmente los viajes en avión, coche y tren/autobús.
También hay un apartado –que se han dejado sin traducir– con el consumo de productos farmacéuticos, la comida, la ropa y la electrónica del hogar: televisor, teléfono y demás. Esto es lo que se denomina la «huella de carbono secundaria» y se puede calcular su equivalente en emisiones de CO2 convencionales.
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