Cita Motherboard los números y referencias publicadas por Digiconomist acerca del consumo de energía de Bitcoin y lo que supone cada transacción que se realiza en esta moneda virtual. Y hay llegado a unas cifras un tanto… inquietantes, por decirlo claramente.
Entre los datos destacan que una simple transacción de bitcoin necesita a día de hoy tanta energía como un hogar durante una semana. Esto se calcula para un total de unas 300.000 transacciones diarias actualmente, lo que equivaldría a un consumo de unos 900 KWh mensuales.
Según estos cálculos (que tras la primera publicación tuvieron que corregir y afinar), debido al precio que ha alcanzado la divisa virtual (unos 7.000 dólares por bitcoin estos días) resultaría rentable para los llamados mineros de bitcoin consumir unos 24 TWh anuales realizando los cálculos criptográficos necesarios para operar y «crear nuevas monedas». Ese enorme cifra equivale al consumo total de electricidad de un país como Nigeria, de 186 millones de habitantes.
Atualmente se calcula en unos 6.000 millones el cambio en dólares de los bitcoin minados anualmente, mientras que el coste de la electricidad es de «sólo» 1.200 millones – de modo que la «operación» es rentable, globalmente. La estimación dice que el 0,12 por ciento de la electricidad generada globalmente se está destinando a Bitcoin.
Todo esto tiene que ver con el diseño de Bitcoin, que hace que a medida que pasa el tiempo se necesiten más cálculos y por ende más capacidad de cómputo y un mayor consumo eléctrico para crear nuevas monedas y verificar las transacciones. En este sentido bitcoin es ineficiente: literalmente miles de veces más ineficiente que las transacciones bancarias tradicionales, algo que sólo se podría resolver con otro fork de bitcoin – por ejemplo con el llamado Segwit2x u otros similares, que sirviera para modificar ligeramente su forma de funcionamiento.
Mientras tanto, cálculos «aproximados pero concienzudos», en la modalidad servilleta, pero tirando a conservadores «en el mejor de los casos», arrojan unas emisiones de 24 a 40 toneladas de CO2 emitidos a la atmósfera por cada bitcoin minado, una cifra que se obtiene de una instalación de minería de bitcoin en Mongolia, donde todo funciona con electricidad procedente del carbón.
Actualización (4 de diciembre de 2017) – Muy interesante al respecto este otro punto de vista: The Bitcoin vs Visa Electricity Consumption Fallacy de Carlos Domingo.