Charles Conrad Jr. al lado de la Surveyor 3 – NASA
El 20 de abril de 1967 la sonda Surveyor 3 de la NASA aterrizó suavemente sobre la superficie de la Luna tras dar un par de botes. Desde allí transmitió 6.315 imágenes usando su cámara de TV antes de ser apagada para su primera noche lunar el 3 de mayo, noche de la que nunca despertó.
El 20 de noviembre de 1969, durante el segundo y último paseo espacial de la misión Apolo 12, Charles «Pete» Conrad y Alan L. Bean se acercaron hasta ella –habían aterrizado a poco más de 300 metros de distancia– para examinarla y para traer algunas piezas de vuelta a la Tierra. La idea era examinarlas para ver cómo las había afectado la exposición al vacío durante cerca de dos años y medio.
Entre ellas estaba la cámara, que hoy en día está expuesta en el Museo Nacional del Aire y el Espacio de Estados Unidos:
La cámara, que fue usada entre otras cosas para estudiar la composición de la superficie de la Luna tomando imágenes de cerca de muestras recogidas con el brazo robot de la sonda, montaba un objetivo de 25 milímetros y otro de 100. Con el segundo fue con el que captó la primera imagen de la Tierra vista desde la superficie de la Luna que vimos jamás:
Eso sí, la imagen no es gran cosa porque aunque la Surveyor 3 usaba un tubo vidicon, que en aquella época era una tecnología de lo más avanzada, su resolución era equivalente a unos 0,04 y 0,36 megapixeles según estuviera funcionando en modo de 200 líneas o de 600 líneas.
Es, hasta ahora, la única vez que hemos vuelto a tocar una sonda de las que hemos enviado a explorar el sistema solar. Quién sabe si algún día visitaremos otras de las sondas que reposan sobre la Luna, sobre Marte, o incluso sobre Titán.