Despegue de la misión – SSST
Un cohete Larga Marcha 6A ha puesto en órbita los 18 primeros satélites de la constelación china de acceso a Internet G60. G60 Starlink, que es como se la conocía al principio, de hecho. Así que hay pocas dudas de su objetivo. Aunque ahora también se la conoce como la constelación Qianfan, que se traduce por Mil velas.
Shanghai Spacecom Satellite Technology (SSST) es la empresa que está detrás de la iniciativa. SSST prevé que la primera fase de la constelación esté formada por 1.296 satélites, de los que 648 se lanzarán antes de finales de 2025 y 108 de aquí a finales de 2024. Pero la constelación podría llegar a tener más de 14.000 satélites, aunque eso dependerá de la demanda.
Y esta no es la única constelación de este tipo que está en marcha en China: China Satellite Network Group está trabajando en la red Guowang, también conocida como SatNet, que constará de unos 13.000 satélites. Aún no han lanzado ninguno pero se espera que empiecen pronto.
Así que cada vez va a ser más fácil conectarse a Internet desde cualquier lugar del mundo; y de hecho las dos redes chinas van a dar cobertura global. Pero nos va a quedar un cielo nocturno bien bonito.
Por cierto que el lanzamiento ha dejado más de 300 fragmentos de basura espacial causados por la explosión de la etapa superior del cohete. Es la tercera vez que sucede esto con un Larga Marcha 6A. Y es bastante peor que llenar el cielo de satélites. Los satélites, al menos, están bajo control.