Por @Alvy — 1 de julio de 2018
El cohete japonés MOMO-2 de Interstellar Technologies sufrió una aparatosa explosión a los pocos segundos del despegue, cuando el motor principal se paró súbitamente y aquello ya no tiraba.
Las caras de desolación del final del vídeo son todo un poema. Como el cohete era de pruebas y obviamente no iba nadie a bordo todo quedó en un susto y una decepción para sus constructores, una empresa privada.