La estación espacial Tiangong-1, que China puso en órbita en 2011 y que recibió a sus primeros tripulantes en 2012— lleva un año fuera de control y caerá a la Tierra “a finales de este año o principios de 2018.”
El artefacto de 12 metros y 9,5 toneladas ha acelerado recientemente su descenso hacia la Tierra, según ScienceAlert. Por su tamaño y peso es bastante probable que algunos fragmentos de la estación, de hasta 100 kg de peso, lleguen a la superficie de la Tierra, aunque por ahora es imposible predecir dónde caerán. Sin embargo la mayor parte de la estación se quemará en la atmósfera durante su reentrada descontrolada y además no es muy probable de que te caiga un fragmento encima.
La Tiangong-1 había sido abandonada en marzo de 2016. La posición de la estación espacial se puede conocer en tiempo real a través de la página N2YO.com, donde se puede comprobar que su perigeo es de poco más de 300 km. A esa altitud el artefacto ya está en contacto con las capas más altas de la atmósfera terrestre, lo que no hace sino acelerar su descenso y aproximar su final.
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