Casi un mes después de su partida de la Estación Espacial Internacional el 28 de marzo de 2018 la cápsula de carga Progress MS-07 terminaba su misión con una reentrada controlada en la atmósfera a las 8:42 del 26 de abril, hora peninsular española.
Durante ese tiempo llevó a cabo los experimentos Otrazhenie (reflexión) e Izgib (curvatura). El primero estudió diversos fenómenos atmosféricos usando las cámaras de televisión de a bordo, que tomaron imágenes de la atmósfera de la Tierra con diferentes ángulos solares para estudiar sus propiedades. El segundo estudió las condiciones de microgravedad a bordo de la nave espacial durante sus movimientos para estabilizar el giro o para orientarse respecto al Sol.
Lo que sigue sin estar muy claro es para qué era un misterioso dispositivo que la MS-07 llevaba en su exterior.
La Progress MS-07 llevó comida, combustible y suministros a la Estación Espacial Internacional y sus tripulantes, incluyendo, entre otras cosas, 880 kilos de combustible, 47 kilos de oxígeno y aire y 430 kilos de agua. Traía de vuelta, como es habitual, material de desecho y ya no necesario a bordo que se desintegró con ella en la atmósfera durante la reentrada.
Su sucesora, la Progress MS-08, está en la EEI desde el 16 de febrero; la Progress MS-09 tiene previsto su lanzamiento para julio de 2018.
La MS-09 se llevará con ella el módulo Pirs de la EEI para desintegrarse juntos en la atmósfera, ya que Pirs va a ser sustituido por el módulo Nauka, por fin listo tras numerosos retrasos.