Impresión artística de VIPER sobre la superficie de la Luna – Centro de Investigación Ames
En un anuncio que ha pillado a casi todo el mundo por sorpresa la NASA ha comunicado que cancela el rover VIPER después de haberse dejado unos 450 millones de dólares en él. El motivo de la cancelación es precisamente el coste: ya va más de un 30 % por encima de lo presupuestado. Y la agencia calcula que para el momento de su lanzamiento, con suerte a finales de 2025, el coste de la misión estaría ya un poco por encima de los 600 millones.
VIPER, de Volatiles Investigating Polar Exploration Rover, Rover para la investigación de volátiles en el polo, tenía como destino el polo sur de la Luna. La idea era que pudiera investigar la presencia de recursos que eventualmente pudieran ser utilizados para misiones tripuladas, fundamentalmente la presencia de hielo de agua.
El lanzamiento del rover estaba previsto inicialmente para finales de 2023. Pero en 2022 la NASA solicitó un aplazamiento hasta finales de 2024 para disponer de más tiempo para las pruebas previas del módulo de aterrizaje Griffin de Astrobotic que tenía que llevarlo a la superficie de la Luna. Solo que desde entonces se han producido retrasos adicionales tanto en el desarrollo del rover, que aunque está construido aún falta que pase todas las pruebas de funcionamiento, como de Griffin que iban a impedir que la misión pudiera ser lanzada antes de septiembre de 2025.
La ley obliga a la NASA a dejar de meter dinero en cualquier misión que sobrepase en un 30 % su presupuesto salvo el necesario para pararla de forma ordenada. La agencia tiene ahora que informar al Congreso de su decisión. Y el Congreso podría decidir autorizar un aumento del gasto para no cancelarla. Pero parece extremadamente poco probable que esto suceda.
Eso sí, la NASA dice que intentará enviar a la Luna los instrumentos que montaba VIPER en otra u otras misiones del programa CLPS (Commercial Lunar Payload Services, Programa comercial de cargas útiles a la Luna). Aunque hasta el uno de agosto cabe la remota posibilidad de que alguna otra institución o empresa decida hacerse cargo de VIPER. Para ello sólo tendría que poner un dólar. Pero, de nuevo, parece extremadamente poco probable que esto suceda.
Impresión artística de Griffin sobre la superficie de la Luna con VIPER aún sobre él – Astrobotic
Astrobotic, por su parte, continuará con el desarrollo de Griffin tal y como tiene contratado con la NASA de cara a un lanzamiento no antes del otoño de 2025. Será una demostración de la capacidad del aterrizador para posarse en la Luna. Aunque lo más sorprendente de todo esto es que la NASA tiene que seguir pagando por ese lanzamiento. Así que proporcionará un simulador de masa a Astrobotic para que lo lance en lugar del rover. Un WTF de libro de los contratos gubernamentales.
Así las cosas todo parece indicar que será China el primer país que explore la utilización de recursos locales en el polo sur de la luna con las misiones Chang'e 7 y Chang'e 8, que están programadas, respectivamente, para 2027 y 2028. La primera incluirá un orbitador, un módulo de aterrizaje, una minisonda móvil y un rover. La segunda es una misión similar pero sin orbitador.