Impresión artística de una Starliner a punto de atracar en la EEI - Boeing
Tras el fiasco del primer intento de lanzar una cápsula Starliner a la Estación Espacial Internacional (EEI) Boeing ha anunciado que harán un segundo intento.
La primera Starliner –no tripulada– fue lanzada el 20 de diciembre de 2019 con el objetivo de acoplarse a la EEI, permanecer allí unos días, y volver a tierra. Pero inmediatamente después de la separación de la cápsula del cohete que la puso en órbita empezaron los problemas. Un reloj mal configurado hizo que la cápsula creyera que estaba once horas más adelante en la misión. Esto la llevó a hacer un gasto excesivo de combustible en unas maniobras innecesaria en ese momento. Además el equipo de tierra tardó unos minutos en poder tomar el control de la cápsula tras darse cuenta de que algo estaba fallando por un fallo en las comunicaciones.
Ese consumo excesivo de combustible hizo imposible que la cápsula pudiera llegar a la EEI así que Boeing y la NASA se vieron obligadas a acortar la misión a apenas 48 horas. Pero pocas horas antes de la reentrada descubrieron que la programación de los motores de maniobra del módulo de servicio estaba mal hecha y que podía haber chocado con la cápsula tras la separación.
En total, una vez terminada esa misión, se llegaron a encontrar más de 60 problemas con la cápsula que hay que solucionar antes del siguiente lanzamiento.
La NASA no había llegado al punto de exigir a Boeing que repitiera la misión pero la empresa ha decidido finalmente que lo hará de todas formas. Será a cargo de la empresa, que ya había hecho una provisión de 410 millones de dólares por si acaso.
No dan fechas todavía pero es poco probable que puedan lanzarla antes del otoño teniendo en cuenta todo lo que han de solucionar. Además, la COVID–19 va a dificultar el trabajo ya que, como poco, dificultará los desplazamientos necesarios de personal si no los impide directamente.